Mis poemas de amor para Michelle
Todos los poemas que he escrito son para ti y solo para ti, tu eres mi inspiración tonta y por mas wey que este, de alguna forma logro pensar un poquito para escribirte algo bonito de vez en cuando.




Me gustas
Por que por varios meses tú fuiste mi único pensamiento
y aunque estemos en mundos opuestos
Soy ten necio que no te dejo
Te quiero por que eres linda y cariñosa y cuando quieres, me haces sentir que soy una persona mas valiosa de lo que pienso.
Por que eres tan tonta que eres graciosa
Y el hablar contigo me hace ser mejor persona
Es por ti que quiero sacar mejores notas
Y si es que un día me ves sonriendo , ten por seguro que tu eres la razón tonta.
Por que te quiero
Por que por varios meses tú fuiste mi único pensamiento
y aunque estemos en mundos opuestos
Soy tan necio que no te dejo
Te quiero por que eres linda y cariñosa y cuando quieres, me haces sentir que soy una persona mas valiosa de lo que pienso.
Por que eres tan tonta que eres graciosa
Y el hablar contigo me hace ser mejor persona
Es por ti que quiero sacar mejores notas
Y si es que un día me ves sonriendo , ten por seguro que tu eres la razón tonta.




Aun te quiero
Te conocí como amiga,
entre risas y tardes sin prisa.
Fue al irme
cuando te dije lo que sentía
y, a la distancia yo te quería.
Aun te quiero
aunque nuestros días sean pantallas y llamadas,
aunque el frío te robe mi aliento
y la noche me devuelva tu silencio.
Acepto que no podemos estar juntos,
que este camino trazado no nos lleve de la mano,
pero tu voz sigue anidada en mi pecho
y tu recuerdo una cicatriz en que habla en silencio.
Te sigo queriendo, Michelle,
sin más esperanza que el consuelo de tu nombre,
sin más promesa que el eco de tus “te quiero”
que aún resuena cuando los ojos cierro.
Algo cambio
Podría haberme quedado en casa e ido a la cama
Podría haber ido al cine en su lugar
La vida podría haberse desplegado por otros caminos
Pero entonces, algo cambió.
¿Por qué te busqué aquel día?
Cuando despertamos, no sabíamos
Que nuestros caminos se cruzarían y cambiarían de rumbo
Llevándonos donde nunca pensamos terminar así.
¿Dónde estaría ahora si nunca nos hubiéramos conocido?
¿Se lo estaría contando a otra persona?
No lo sé, Michelle, pero ese día,
Algo cambió.




La pena que me llama devuelta
Terminamos, como olas que se rompen suaves en la orilla.
Definitivo, pero nunca del todo ausente.
Dejas huellas en mi silencio, las llevo como moretones que no quiero curar.
Tu nombre se esconde en las costuras de cada suspiro,
tu voz es el eco que ruego olvidar.
Juramos que es la última vez, cada vez, como si cien veces antes, no hubiéramos muerto en los brazos del otro.
Aun así, encuentras el camino de regreso por las grietas que juré sellar.
Y te dejo entrar, como una polilla rogándole a la llama por otra quemadura.
Sabes a veneno que deseo, ruina dulce en mis labios.
Nos besamos como adictos, temblando, hambrientos, luchando contra el subidón que sabemos que nos va a matar.